Video-registro
A/r/tography Films
El vídeo-registro es una estructura ensayística basada en unidades mínimas de significado audiovisual, en la que la limitación de la capacidad significativa está garantizada por la acotación de los mensajes y la forma de sus contenidos. Cada unidad supone en sí una narración independiente. Estas unidades de narratividad mínima nos permiten acceder a datos sobre cómo se originan, que objetivo despliegan, que orientación y perspectiva plantean respecto a la interacción con la realidad, conformándose como una fuente valiosa en la obtención de imágenes.
Desde el punto de vista creativo promueven dos circunstancias básicas en la creación de artefactos audiovisuales. Por un lado, permitir la estructuración de un tipo de documento, que tiene unas cualidades específicas y que puede actuar independientemente sin necesidad de configurarse en una construcción mayor. Y por otro lado, favorecer una acotación significativa de las imágenes creadas dentro de una estructura narrativa mayor, descontextualizando su significado e implicando procesos de análisis.
En este sentido, los vídeo-registros no pueden ser manipulados a través de la edición o el montaje posterior. Formalmente son unidades temporales inferiores a 30 segundos que tienen un origen performativo. Respecto al enfoque o perspectiva del realizador/a pueden ser: objetivos —como me relaciono en la situación—, o subjetivo —como se relacionan otros en determinadas relaciones—. No deberán estar vinculados a texto alguno —ni hablado ni escrito—, aunque se permite la inclusión de registros sonoros contextuales o ambientales —como pueden ser la voz de un individuo o colectivo, siempre que no hayan sido planteadas de antemano o ensayadas—. Se permite una finalidad estética o ‘estilo fotográfico’, que favorezca un punto de vista interpretativo y que no se limite a ser un recurso meramente estético o decorativo —este aspecto puede ser considerado o acordado por un equipo, si se trata de una experiencia en la que participan varias personas—. Si los resultados derivasen en una narrativa compleja más extensa, la relacionabilidad entre las imágenes podrá ser de tipo formal, conceptual, o poético, respetándose siempre cada unidad y el formato inicial.
El vídeo-registro, además, puede ser utilizado como una técnica de experimentación narrativa no lineal que permita disponer una dinámica de creación, basada en el establecimiento de distintos nexos entre las unidades mínimas de narración, sobre una estructura narrativa de conexiones rizomáticas. Si estas relaciones permiten cartografíar los diversos recorridos, en el que cada vídeo-registro además de ser una unidad de significado puede considerarse como matriz en un hipertexto. El grado de ‘potencialidad’ de un video-registro en una multinarrativa determinará un conjunto de intereses y decisiones que condicionan el nivel de significación de cada unidad. Por lo tanto, un vídeo-registro puede ser múltiple; estructurar diferentes lineas y conexiones narrativas en un relato, y propiciar discursos endógenos o autogenerativos creados por dos o más interlocutores que establecen acuerdos de interpretación dentro del mismo proceso comunicativo.
En determinados procesos los video-registros pueden ser montados dentro de narrativas complejas, incluyendo una banda sonora extradiegética, aunque lo habitual es ser fiel al sonido y la diégesis de los hechos que suceden, aplicando una edición de cortes simples en el montaje posterior.
Video-registro
Supone una estructura ensayística, basada en unidades mínimas de significado audiovisual, en la que la limitación de la capacidad significativa está garantizada por la acotación de los mensajes y la forma de sus contenidos.
Un vídeo-registro puede ser múltiple; estructurar diferentes lineas y conexiones narrativas en un relato, y propiciar discursos endógenos o autogenerativos creados por dos o más interlocutores que establecen acuerdos de interpretación dentro del mismo proceso comunicativo.
Vídeo-IA
Con la aparición de la Inteligencia Artificial el concepto de presente se ha modificado y también la capacidad para entender su registro, planteándose nuevas posibilidades en el campo del video-ensayo y su aplicación a/r/tográfica
EXPERIENCIAS
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Los vídeo-registros no pueden ser manipulados a través de la edición o el montaje posterior.
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Deben de ser unidades temporales inferiores a 30 segundos
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Origen performativo (enfoque objetivo —como me relaciono en la situación—, o subjetivo —como se relacionan otros)
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No pueden estar vinculados a texto alguno —ni hablado ni escrito—, aunque se permite la inclusión de registros sonoros contextuales o ambientales, siempre que no hayan sido planteados de antemano o ensayados.
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Se permite una finalidad estética o ‘estilo fotográfico’, que este favorezca un punto de vista interpretativo y que no se limite a ser un recurso meramente estético o decorativo.
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La relacionabilidad entre las imágenes podrá ser de tipo formal, conceptual, o poético, respetándose siempre cada unidad y el formato inicial.
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Puede ser utilizado como una técnica de experimentación narrativa no lineal. Cada vídeo-registro además de suponer una unidad, puede considerarse como matriz en un hipertexto.
Ángel García Roldán. Videoregistro #25. PARADOGICAL METHOD. 2019